martes, octubre 04, 2011

La cultura-mundo II


Las obras del pasado no se contemplan ya con veneración, con recogimiento y en un silencio más o menos mezclado con temor, sino con la relajación típica de las muchedumbres de vacaciones. Los cuadros y las catedrales se consumen en cierto modo como en un fast-food, según la lógica del zapeo acelerado. Una encuesta reciente revela que el visitante medio pasa entre 15 y 40 segundos mirando El rapto de las sabinas de David, según se consulte o no la etiqueta; entre 5 y 9 segundos La gran odalisca de Ingres.
La atmósfera mágica de la obra ha cedido paso a una experiencia turística, sintomática de la sociedad de hiperconsumo...

La cultura-mundo. Respuesta a una sociedad desorientada
Gilles Lipovetsky y Jean Serroy. de. Anagrama.